Vargas Llosa: 'Onetti se abría las entrañas y se las dejaba en la escritura'

Texto y foto; www.elmundo.es

Para Mario Vargas Llosa, Juan Carlos Onetti es el primer novelista moderno de nuestra lengua, un escritor que "se abría las entrañas y se las dejaba en la escritura". Así ha recordado el escritor peruano al autor de 'El Pozo', en el homenaje que se le rinde en la Casa de América por el centenario de su nacimiento.

La proyección de 'El infierno tan temido', basado en un relato de Onetti e incluido en la representación teatral 'La verdad de las mentiras', que hicieron Mario Vargas Llosa y Aitana Sánchez Gijón, ha servido de antesala para una intensa disertación de Vargas Llosa, que fue interrogado por el periodista Juan Cruz sobre Onetti, uno de sus escritores favoritos y a quien le ha dedicado un libro 'El viaje a la ficción. El mundo de Juan Carlos Onetti' (Alfaguara).

Aunque Vargas Llosa sólo lo trató en dos ocasiones, una de ellas en San Francisco (California), en una reunión de escritores organizada por el PEN club, salió una de esas frases ya emblemáticas.

En ese encuentro Onetti, que "era muy tímido y no salía nunca de la habitación, donde leía sus novelas policiacas y estaba con su whisky", tomando un día un café, le preguntó sobre su forma de trabajar. Vargas Llosa le contestó que era muy ordenado y que escribía con un horario. Entonces Onetti le contestó: "Lo que pasa es que tú tienes unas relaciones conyugales con la literatura y yo adúlteras".

Una frase que ha vuelto a hacer sonreír a un auditorio repleto, con más de 400 personas, entre ellas la viuda del escritor uruguayo Dorothy Muhr, con quien estuvo casado 40 años.

Este acto es el primero de una serie de actividades que ha organizado el ministerio de Cultura y la Sociedad de Conmemoraciones Culturales (SECC), junto con otras instituciones, por el centenario del escritor, Premio Cervantes, que llegó a Madrid en 1975 exiliado de su país tras el golpe militar, y que vivió, escribió y leyó en la cama de su apartamento en los últimos diez años.

Varga Llosa ha recordado la fuerza y la belleza en la literatura de Onetti, a pesar de retratar un mundo muy duro, amargo, pesimista y asfixiante. "En su mundo hay una visión de la condición humana profundamente desesperante. No hay un sólo personaje de Onetti que no esté corrompido, a veces por la mediocridad, pero a pesar de eso su literatura es de una belleza aplastante y ahí está su grandeza, su genio como escritor", ha señalado.

Para Vargas Llosa, la vocación literaria de Onetti es "orgánica, lo que hay en ella no es el buen humor, ni el cariño a los niños que me dice su mujer que tenía, sino todo lo contrario, una visión apocalíptica, pesimista, casi nihilista".

El escritor peruano definió a Onetti con una palabra: "moderno, creó un lenguaje moderno en un momento en el que imperaba un realismo muy naturalista que disociaba en muchos casos la historia del lenguaje, como buen lector se alimentó de los grandes, creador de un mundo propio y heredero de esa frustración de la América Latina de los años 50". Onetti "logra deleitar sufriendo, seducir y encantar mientras nos sumerge en el mal y el horror", afirma el autor de 'La fiesta del chivo'.