domingo, 3 de mayo de 2009

ARCHIVOS ABIERTOS



JULIO CASTRO 

"El banco fijo y la mesa colectiva"
Cuarta edición - 2007. Editado por el Ministerio de Educación y Cultura.





Montevideo, 2 de mayo de 1942.
Sr. Julio Castro.

Por casualidad, llegó a mis manos su trabajo sobre “EL BANCO FIJO Y LA MESA COLECTIVA”.
Sabe Ud. cuánto aprecio su noble capacidad, por eso lo
leí y también porque fui yo la que propuse ese tema para el
Concurso Anual de Pedagogía del Ministerio de Instrucción
Pública correspondiente al año 1941.
Coincido en absoluto con las apreciaciones de Ud. EL
BANCO FIJO Y LA MESA COLECTIVA son el símbolo de
dos épocas, de dos tendencias educativas: pasado y futuro,
escuela clásica y escuela nueva, educación intelectualista y
educación activa.
Hoy en su erudito trabajo, justeza y amplitud de enfoque,
serenidad y exacto e ilustrado criterio de apreciación.
Sería de lamentar que tan bella realización quedara sólo en
conocimiento de un reducido grupo de maestros y de amigos;
por eso, por lo que apreciamos sus cualidades de estudio
y ponderación y por el bien que esa lectura puede hacer
en el sentido de acelerar en nuestro medio el advenimiento
real de la Nueva Escuela a que todos aspiramos, un grupo
de maestros y profesores hemos resuelto –si contamos con
el asentimiento de Ud.– dar a ese valioso trabajo, la permanencia
definitiva del libro.

Saluda a Ud. atte.
MARIA ORTICOCHEA.


JULIO CASTRO



“El banco fijo y la mesa colectiva”, comprende un estudio
comparativo de dos tipos de mobiliario escolar. Pero el tema
no se reduce sólo a eso: tanto el banco como la mesa colectiva,
corresponden a dos etapas del desarrollo de la pedagogía.
Es más: ambos son consecuencia de concepciones
pedagógicas distintas y, en cierto modo, opuestas.
De ahí que el tema surja por derivación. Si el banco fijo
representa como lo dice Dewey, el elemento símbolo de la
pedagogía tradicional, la mesa colectiva puede representar,
del mismo modo, las tendencias generales de la nueva educación.
La discusión se extiende así a problemas mucho más amplios
que los que a primera vista surgen del tema. En el presente
trabajo, lo consideramos a éste en toda su amplitud,
como lo imponen, a nuestro juicio, dos razones fundamentales:
primero, si banco y mesa son las consecuencias de
dos conceptos pedagógicos distintos, los fundamentos de
la discusión se encuentran en esos conceptos; y segundo,
creemos que para dar fuerza y autoridad al criterio que sustentamos
como tesis, debemos fundarnos en la naturaleza
de las ideas que sirven de base a los términos en discusión.
No necesitamos más para explicar el plan de desarrollo del
presente trabajo.
Hemos buscado localizar exactamente, en el tiempo y en
el espacio, los elementos de juicio sobre los que hemos elaborado
nuestras opiniones. Esto nos ha obligado a plantear
el trabajo en dos planos; en el tiempo: PEDAGOGÍA TRADICIONAL
Y NUEVA EDUCACIÓN; en el espacio: el movimiento
pedagógico general, y su localización en el país.
Al vincular estos elementos hemos tratado de entrar a su
estudio libres de preocupaciones que pudieran determinar
“a priori” las conclusiones a que llegamos. Hemos seguido
objetiva, históricamente, los procesos, deteniéndonos considerablemente
en los momentos que consideramos de más
Vieja y Nueva Educación 33
precisa concreción. Equivocados o no, hemos buscado la posición
más objetiva para interpretar las ideas pedagógicas
con relación a su tiempo. Eso nos ha obligado a giros y referencias
de carácter histórico. Los hemos afrontado, porque
tenemos la seguridad de que no es posible la interpretación
pedagógica si no va aparejada a la de los elementos históricos
– en el más amplio sentido– que le son contemporáneos.
Cada época influye en la educación, y, precisamente, la razón
del tema está en un desequilibrio entre la época actual y
algunas supervivencias de tiempos ya idos.
Las conclusiones a que hemos arribado después de una
discusión totalmente expositiva, tienden a sincronizar algunas
soluciones pedagógicas con el momento histórico. Con
la mesa colectiva hay una serie de elementos que se están
incorporando a la escuela –o que deben incorporarse– y que
comprenden también parte de nuestras conclusiones.
Si nuestro trabajo contribuyera a “poner en hora” el pensamiento
pedagógico nacional y especialmente algunas prácticas
educativas, su finalidad estaría ya satisfecha.

Julio Castro
Montevideo, Octubre de 1941.




Fuentes: 
- www.mec.edu.uy, 
- www.juliocastro.edu.uy
- Castro, Julio. El banco fijo y la mesa colectiva. (Edición del MEC, Montevideo - 2007)
- fotos www.larepublica.com.uy

**********************************************************************************************************************
***********************************************************
***********************************************************

LUNES 11 DE MAYO DE 2009

LA ESCUELA Y LOS ADOLESCENTES









El Informe sobre tendencias sociales y educativas en América Latina es una publicación anual elaborada en el marco del proyecto SITEAL, una iniciativa que el IIPE-UNESCO Buenos Aires y la Organización de Estados Iberoamericanos desarrollan en forma conjunta desde inicios del año 2003. Esta publicación pone a disposición de los actores de la comunidad educativa herramientas conceptuales y de diagnóstico destinadas a contribuir a la formulación de políticas educativas sensibles a la complejidad y diversidad de escenarios sociales que se van configurando en los países de la región. 

En este tercer número del 
Informe sobre tendencias sociales y educativas en América Latina,publicado en diciembre de 2008, se hace énfasis en los adolescentes y su relación con la escuela.

El debate sobre los adolescentes y su relación con los sistemas educativos se va consolidando crecientemente en la región, especialmente desde que quedan en la agenda educativa como uno de los principales desafíos por afrontar. En este contexto, desde el SITEAL se busca hacer un aporte específico, que tiene que ver con poner a disposición en el debate aquellos hallazgos que surgen de una exploración en profundidad de las encuestas de hogares que se generan, año a año, en los países de la región.

Se muestran dos aspectos de la relación de los sistemas educativos con los adolescentes. Por un lado, recuperando toda una tradición del análisis de las desigualdades sociales en el acceso al conocimiento, y mostrando desde allí el modo en que el origen social de los adolescentes marca trayectorias educativas muy diferenciadas. Por el otro, invitando a incorporar una mirada que va más allá del origen social de estos adolescentes, y que pone el énfasis en aspectos más relacionado con su subjetividad, con sus formas de socialización, sus elecciones, sus identidades.

Subyace a la elección de esta doble mirada la certeza de que ambas se necesitan a la hora de abordar el diseño de estrategias educativas tendientes a garantizar una educación de calidad para todos ellos, y ofrecerles la posibilidad de completar el nivel medio de un modo que les represente una experiencia altamente enriquecedora y formativa para su vida en el futuro.


ACCEDÉ AL INFORME COMPLETO

 

TEXTOS, FOTO Y ARCHIVOS TOMADOS DE www.siteal.iipe-oei.org


tendencias

0 comentarios: on "ARCHIVOS ABIERTOS"

Publicar un comentario